Me llamo Ana González Duque, aunque en la red se me conoció durante muchos años como “Doctora Jomeini”, que es el nombre de mi primer blog: un blog gratuito en Blogger que llegó a tener 10000 visitas/día. A raíz de escribir en él, me contrataron como Community Manager en una página médica y tuve que aprender marketing aplicado a redes y SEO.
Siempre, desde pequeña, me gustó escribir, pero estaba claro que tenía que vivir de otra cosa. ¿Qué escritor vive hoy de lo que escribe? Así que hice Medicina porque me gusta tratar con la gente y ayudar a los demás. Mi primer blog iba de eso: de aprender a ser médico. No sabía yo que también me abriría las puertas del mundo editorial.
Mi primera novela (“El blog de la doctora Jomeini”) ha vendido tres ediciones en España y en Latinoamérica . Pero entrar en el circuito editorial me hizo darme cuenta de que lo que hacía como CM a nivel profesional, también podía aplicarse a mi trabajo como escritor. Y que, realmente, el esfuerzo de marketing mayor lo hacía yo.
Decidí autopublicar mi segunda novela –"Planes de boda"– como experimento. Hice un proceso de crowdfunding porque no tenía los fondos necesarios para contratar a un ilustrador, un corrector y un maquetador. Y, ante mi sorpresa, conseguí que los lectores me apoyaran. Al mes de su publicación, Planes de boda había pagado –con los beneficios obtenidos– los gastos y a partir de ahí, todo eran ingresos.
Me contrataron como profesora de marketing online en dos escuelas literarias. Y me animé a predicar con el ejemplo: apliqué todas las técnicas de marketing que conocía en la promoción de mi tercera novela: "Leyendas de la Tierra Límite: Las Tierras Blancas". Vamos por 10000 ejemplares y subiendo.
En el 2015, en Enero, tuve que darme de alta como autónomo por los ingresos como escritor. Decidí contratar a un distribuidor para distribuir también en librerías. Y monté mi propia tienda online. Lo mejor es que, a partir de ese momento, ganaba lo suficiente con mis libros como para permitirme recortar mi jornada laboral como médico para dedicarme a escribir.
En el 2017, dejé completamente mi trabajo como médico (solo ejerzo tres horas a la semana) y me volqué por completo en la literatura. Actualmente, dirijo una editorial de libros médicos y escribo, escribo y escribo.