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Nacido en Valencia, Alexandre Escrivà combina la música y la escritura como profesión, y ha supuesto toda una revelación editorial. Su primer libro, El último caso de William Parker, es un thriller adictivo y oscuro en el que su protagonista, un expolicía atormentado por su pasado, sigue la pista de un nuevo asesino despiadado. Alexandre escribió su libro después de participar en el curso “Cómo escribir novela negra” de Cursiva, y hoy tenemos el placer de poder hablar con él para que nos cuente cómo ha sido el proceso de escritura de su primera novela, y para que pueda dar algunos consejos a todos aquellos escritores principiantes que también quieren publicar su primera novela.

¡Bienvenido de nuevo a Cursiva, Alexandre!

¿Por qué decidiste empezar a escribir? ¿Siempre has tenido esa inquietud?

Empecé a escribir desde pequeño, en concursos literarios del colegio. No tenía ni idea de lo que quería ser de mayor, pero tenía muy claro que quería escribir un libro. Durante el instituto seguí escribiendo de forma casual, pero no fue hasta 2020 cuando me puse a escribir de forma regular.

Con la pandemia, todos mis proyectos musicales se cancelaron, y me quedé sin ningún objetivo a corto plazo. Escribí mi primer esbozo de novela, un thriller, pero no El último caso de William Parker. Justo después de terminar esa historia, yo ya pensaba en cuál sería la siguiente. Se generó en mí una necesidad de escribir que mantengo hoy en día.

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¿Por qué decidiste formarte para escribir?

Lo decidí una vez que ya había empezado a escribir la primera versión de El último caso de William Parker. El caso es que yo empecé a escribirlo siendo un “escritor de brújula”, que es el tipo de escritor que se deja fluir y que no tiene nada planeado y va improvisando sobre la marcha. Muchas veces me sucedía que escribía dos párrafos y ya no sabía cómo continuar la historia, y todo era un intento fallido. Curiosamente, un día vi un anuncio del curso de escritura de novela negra de Cursiva, y decidí informarme. Tenía claro que escribir me gustaba muchísimo, y creía que la historia en la que trabajaba podía funcionar, pero necesitaba hallar la forma correcta de contarla. Al final me apunté al curso porque pensé que, aunque era una inversión de tiempo y dinero, escribir me apasionaba y quería mejorar y sentirme realizado.

Háblanos un poco de tu libro, 'El último caso de William Parker'. ¿Por qué decidiste escribir una novela negra? ¿En qué te inspiraste para escribirlo? ¿Tienes algún escritor referente?

¿Por qué decidiste escribir una novela negra? ¿Tienes algún escritor referente?

La verdad es que era el género que a mí me gustaba leer, y cuando me ponía a escribir siempre terminaba creando una trama policial. En mi época de estudiante, cuando hacía muchos viajes en tren, me acercaba a menudo a las librerías de las estaciones a buscar libros para leer durante el trayecto, y el primer libro que leí fue uno que curiosamente tenéis aquí guardado, Muñeco de trapo (Ragdoll) de Daniel Cole. Me fascinó la intriga que generaba, la sensación de querer saber más y la tensión que creaban algunas escenas. Después de leerlo, seguí consumiendo novela negra y el género consiguió atraparme.

Sobre mis referentes, diría que ya desde pequeño me interesaban los libros de Agatha Christie, por ejemplo, ya que mi madre era una ávida lectora y yo siempre quería leer lo que ella leía. También mencionaría a Javier Castillo, Joël Dicker, Mikel Santiago, César Pérez Gellida y Susana Martín Gijón. Realmente, hay muchos. También me llamó mucho la atención Nagore Suárez, sobre todo porque también empezó a publicar siendo muy joven y eso me inspiró.

¿En qué te ayudó Cursiva para escribir tu libro?

Me vino genial, porque en el curso me dieron las herramientas que yo necesitaba para planificarme el trabajo. Pasé de ser un escritor de brújula a uno más de mapa, de pensar los puntos clave de la trama e ir uniéndolos. Me encantó poder recibir feedback de escritores de primer nivel, como Susana Martín Gijón, y poder preguntar cualquier duda a través de la plataforma, que la verdad es que funciona muy bien. Hay una gran variedad de cursos, y eso también está genial, me parecen interesantísimos. El hecho de que fuese un curso online era una gran ventaja, porque yo antes vivía en Valencia, y también el hecho de que las clases quedaran grabadas porque eran por la tarde y yo justamente trabajaba por las tardes en un conservatorio, entonces podía verlas siempre que quisiera.

En Cursiva me ayudaron a ganar la confianza para escribir la novela, y me dieron las herramientas necesarias para hacerlo. Cuando la terminé, realmente estaba contento con mi trabajo, me sentía motivado y tenía mucha confianza en que lo que había escrito podía funcionar. La motivación es muy importante cuando escribes, ya que, si tú mismo no crees en lo que estás haciendo, es muy complicado llegar hasta el final.

Promocionas tu libro y tu marca de escritor en eventos, redes sociales, etc. ¿Qué métodos de promoción te gustan más?

No hay ningún tipo de promoción que aborrezca, ni mucho menos, o que no me guste. Es cierto que he hecho mucha promoción del libro, pero creo que es algo necesario. Aunque la novela y su origen no varían, sí que en cada evento y en cada ciudad conoces a gente distinta a la que le ha gustado tu obra y que siempre está muy agradecida. Creo que el contacto con el lector es algo muy bonito, y eso genera una comunidad que te apoya y te hace crecer.

Las redes sociales también son muy importantes. El feedback de los lectores, el hecho de poder hablar con ellos tan fácilmente, al final hace que también se hable bien de ti, porque ya no es solo el libro, sino que también eres tú como persona, tu marca personal, lo que te hará crecer. Sí que es un método de promoción en el que tienes que invertir tiempo, y entender que lo que tú hagas no va a ser para todo el mundo, pero es muy útil.

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¿Cuáles son tus próximos pasos como escritor? ¿Tienes ideas para futuros proyectos?

Actualmente, estoy trabajando en mi segunda novela, diría que acercándome a la fase final del proceso de escritura. Va a ser otra novela negra, un thriller, pero no va a tener nada que ver con El último caso de William Parker, sobre todo porque considero que la gente me está descubriendo ahora como autor, y para mí es importante que cualquier lector que no haya leído mi primer libro pueda leer el segundo. Quiero asentarme en el género negro, llegar a cuanta más gente mejor y hacerlo mejorando con cada novela que publique.

Ya para terminar, ¿qué les dirías a jóvenes como tú que quieren escribir su primer libro?

Sobre todo, es importante no rendirse, creer en uno mismo y en el proyecto que se tenga entre manos. Todos los autores deben ponerse delante de la famosa página en blanco, de sufrir el hecho de no saber qué escribir, de no saber cómo avanzar una historia, pero al final es cuestión de tiempo y de trabajo.

También es importante estar dispuesto a aprender de otros escritores, de la gente que realmente sabe escribir. Por supuesto, animo mucho a la gente a que trabaje en mejorar sus habilidades si realmente quieren escribir mejor. Yo, por ejemplo, invertí en Cursiva y es algo de lo que no me arrepiento. Lo recomiendo muchísimo.

Escribir un libro no es fácil, vas a encontrarte con muchos miedos e inseguridades por el camino, pero creo que si uno es perseverante y lucha para conseguir lo que quiere, al final todo llega.

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